Escucha las mejores radios de Anime en tu celular

Autor Tema: Veneno Letal  (Leído 7422 veces)

Tsukuyomi-sama Desconectado
« en: Septiembre 08, 2012, 09:47 pm »

  • レベル0
  • *
  • Mensajes: 11
  • Karma: 0
  • Sexo: Femenino
  • hola a tod@s!!! pues bueno sobre mi.. me gusta
    • By: Tsukuyomi-sama
    • Awards
Veneno Letal
« en: Septiembre 08, 2012, 09:47 pm »
Veneno letal
Autor: Tsukuyomi-sama

Resumen:
Durante décadas los vampiros han vivido ocultos, ante los seres humanos o cualquier otra criatura viviente no eran más que un mito; un simple mito.


Pero algo comenzó a cambiar en la ciudad, extraños sucesos comienzan a desencadenar el terror en Tokio, haciendo que la vida cotidiana de todos cambie; tras la muerte de Rock lee un entrenador de in gimnasio muy reconocido.


Sakura haruno una joven de 17 años padece una extraña patología que debilita su corazón. Se ve interesada en los sucesos ocurridos y un mes después de que su doctora le de una fatal noticia acabando con sus esperanzas de vivir como lo había deseando conoce a sasuke uchiha un vampiro.


 


¿Qué significa realmente la inmortalidad?


Clasificación: Todos los publicos
Categorías: NARUTO
Finalizado: Sí


 bueno este fic es un one-shot trate de hacer lo mas posible para que pareciera un fic de vampiros pero creo que no lo logre chicos espero que les guste

nos leemos abajo :)


Veneno letal

.

.

.

.

.

.

.
¿Que significa realmente la inmortalidad? ¿Por qué todos los que son bendecidos con este don se sienten malditos?

<>

-         Sakura, ¿escribiendo tan temprano?- pregunto una mujer entrando a su habitación.

-         Tsunade-sama, que bueno que me visite- dijo la pelirosa sonriendo.

-         No hables como si hubiera pasado tanto tiempo solo fueron tres días- dijo la rubia con molestia para luego hacer las inspecciones rutinarias a la haruno.

-         ¿Cuándo podre irme?- pregunto ansiosa?

-         Aun no lo se sakura, ya he sido informada de tu crisis- respondió con preocupación.

-         Fue solo un mal sueño…

-         Que hiso que tu corazón se detuviera por unos minutos- respondió con voz de reproche a la pelirosa- preocúpate por descansar sakura.

Había transcurrido un año desde que sakura estaba internada en el hospital; su condición empeoraba con el tiempo y sentía estar perdiendo el tiempo recostada en esa cama sin hacer nada.

Lo único que recordaba de lo que había vivido antes de entrar al hospital era aquel dia, cuando sai la cito al parque cerca de su casa.

:-------------:------------------:::::----------------------:---------------:

El sol comenzaba a ocultarse entre las grandes montañas; hacia mucho frio en el lugar mientras que sakura se encontraba parada debajo de un árbol esperando la llegada de sai.

-         Sakura- dijo el pelinegro al verla.

-         Sai ¿Por qué me citaste aquí?- pregunto la pelirosa con tranquilidad.

-         ¿es cierto que padeces una grave enfermedad?- pregunto con seriedad.

El cuerpo de sakura se quedo inmóvil ante aquel comentario ¿se había echo tan evidente su padecimiento? ¿Que debía hacer o decir?

-         Sai yo…

-         Lo siento sakura- dijo dándole la espalda- no soy la persona indicada para ti esto se acabo-dijo con frialdad.

-         Sai

-         No puedo ayudarte ni apoyarte como lo mereces. No estoy preparado para algo así… lo siento sakura- dijo para luego marcharse sin decir mas.

<>- pensó mientras miraba atreves del cristal de la ventana desde su cama.

Los rayos del sol apenas penetraban su piel; el aire artificial no la reconfortaba lo suficiente ella quería algo mas… quería ponerse de pie sobre la fría grama de los parques, correr, gritar, volver a ser todo lo que había dejado de ser.

Luego de varias horas comenzaba a caer la noche y las enfermeras comenzaban a salir y entrar de las habitaciones revisando que los pacientes estuvieran bien; shisune solo se aseguraba de que sakura estuviera en la habitación ya que desde que la tenían allí internada había intentando escapar innumerables veces, no era fácil renunciar a su libertad había tenido que pasar por mucho; aquella enfermedad había destruido su vida por completo pero ella se mantenía firme y fuerte no estaba dispuesta a dejar que esa enfermedad la venciera.

: ------------------: 1 Semana Después: ---------------------:

Las calles estaban completamente oscuras y solitarias. Mientras que un extraño chico se aproximaba a su casa después de su trabajo como entrenador; su traje verde ajustado podía notarse en media de aquella oscuridad el joven caminaba con tranquilidad por las calles cuando de pronto numerosos pasos comenzaban a escucharse detrás.

El miedo y el nerviosismo se apoderaban del chico haciéndolo apresurar el paso; hacia mucho más frio y algo en el ambiente lo hacían atemorizarse mas y mas.

-         Pareces asustado- dijo una mujer de cabello azul parada frente a el.

-         ¿q- quien eres?- pregunto lee

-         Vaya, vaya konan veo que has encontrado algo- dijo un rubio con arrogancia acercándose.

-         ¡vete deidara!- dijo la chica con frialdad- el es mi presa.

¿Quiénes eran estos extraños? Parecían pelear por su compañía aun asi había algo mas en ellos que le daba mala espina al pelinegro quien aun preso del miedo y sin entender lo que sucedía intento escapar; correr lo mas lejos que le dieran sus piernas.

Comenzó a correr rápidamente a fin de cuentas su casa quedaba solo a tres cuadras pero no quería llevarlos hasta allí, aquella mujer apareció de nuevo frente a el cerrándole el paso en medio de un callejón que había tomado como atajo

-         ¿Qué es lo que quieres?- pregunto asustado.

-         Deja de hacer preguntas tontas- dijo la peli azul molesta

Había algo extraño en esa chica; sus ojos tenían un extraño brillo su cara pálida y su forma de hablar era tan antigua, algo estaba mal esa rapidez en sus movimientos no era normal.

Lee estaba petrificado ante aquella fuerte presencia. La peli azul se acercaba a el lentamente mirándolo a los ojos con malicia, aquel momento parecía eterno y aun así lee no tenia la menor idea de lo que sucedía o sucedería; hasta que vio desaparcar la silueta de konan y sentir su presencia detrás de el.

-         Me gustaba el olor de tu sangre- susurro para luego clavarle los colmillos en el cuello.

Succionaba su sangre con desesperación mientras que lee poco a poco perdía el movimiento en su cuerpo y también su fuerza.

Konan parecía haber sido saciada solo con aquel pequeño cuerpo y luego de haber dejado sin sangre circulando en su cuerpo se marcho dejándolo en el piso.

La peli azul regreso al escondite donde ella y sus compañeros se ocultaban. Akatsuki; un grupo de vampiros renegados los cuales habían vivido desde las épocas feudales causando el terror y el desastre a cada aldea que pisaban y ahora después de haber sido despertados después de mucho tiempo estaban en Tokio, para desencadenar el odio y el terror en los humanos.

-         Konan ¿Dónde estabas?- pregunto nagato con seriedad.

-         Salí a dar un paseo- respondió con tranquilidad.

-         Samehada huele sangre- dijo kisame acercándose.

-         ¡konan!- dijo nagato molesto.

-          Salió a comer, asesino a un humano y no escondió el cuerpo- respondió zetsu quien la había estado espiando.

-         Les recuerdo que no debemos dejar rastro alguno de nuestras victimas no quiero problemas esta vez- dijo nagato molesto.

=========+============ 4Dias Después ==============+===========

Los cuerpos seguían apareciendo cada noche y al ver que dichos sucesos estaban aterrorizando a todos; se dio un toque de queda. A partir de las cinco de la tarde serian tocadas las campanas para que todos regresaran a sus casas para que todos regresaran a sus casas y aseguraran puertas y ventanas.

Todo aquel que desobedecía las ordenes correría el riesgo de ser devorado por las bestias que rondaban las calles por las noches. Una vez mas, se sospechaba que akatsuki los legendarios vampiros de la nube roja eran los culpables de todo; pero esto solo era un  mito. Habían otros vampiros en la ciudad y sabían que akatsuki estaba allí por lo que seria fácil que los culparan de todo el caos que ellos causaban.

Un pelinegro caminaba por las calles solitarias de Tokio algo confundido ¿realmente estaba en Tokio? ¿Por qué las calles no estaban repletas de gente? Solo eran las siete.

El pelinegro parecía estar relajado ante a que extraño suceso; nadie lo vería así que no tendría que esconderse, podría hacer su recorrido tranquilamente e intentar aclarar sus ideas en cuanto a lo que sucedía.

-         ¿Qué haces aquí?- pregunto un hombre detrás de el.

-         No tengo por que responder… itachi- respondió sasuke con voz cortante.

-         ¿sigues molesto?- pregunto con fastidio el otro pelinegro.

-         ¿de que estas hablando?

-         De lo que sucedió con el clan…

-         Fue necesario ¡eso me dirás ahora, asesinaste a todo el clan uchiha el mas fuerte clan de vampiros que existe fuiste tan desalmado como para asesinarlo para escapar con su inmortalidad y me dejaste vivir!- respondió sasuke molesto.

-         Eso era lo que ellos querían sasuke, además el alma de mi padre jamás me hubiera dejado en paz si te hubiera asesinado.

-         Siempre dices lo mismo itachi, estoy arto de tus excusas- respondió sasuke.

-         No puedes morir sin enfrentarte a tu destino… sasuke- susurro para luego desaparecer.

¿Destino? Todos caminamos por la vida ya sea intentando encontrarlo o huir de el ¿Cuál será el caso de sasuke? No era fácil de estar condenado a ser vampiro, a vivir preguntándose a cada minuto ¿Qué es la muerte?

00000000==========000000000000===========000000000000

En la oscuridad de la noche y las calles de Tokio se ocultaban un grupo de chicos protegiéndose con la espesa capa de neblina.

-         ¡maldito toque de queda!- se quejaba una pelirroja mientras limpiaba su flauta.

-         Huelo algo sakon- dijo un chico con seriedad.

-         Yo también lo huelo ukon- respondió- ¡comida!- dijeron los siamesos al unísono.

No eran solo ellos los que se refugiaban en las calles aquel hombre parecía estar ebrio y mientras caminaba con dificultad balbuceaba cosas.

-         Lee… ¿Por qué tenias que morir de esta forma?- decía envuelto en llanto.

-         ¡demonios! Esta ebrio- dijo sakon con molestia.

-         Pues tendrán que conformarse- dijo su líder un peliblanco el cual no había hablado hasta ese momento.

Los cinco chicos rodearon al hombre quien a pesar de su estado lo noto.

-         ¿Quiénes son ustedes?- pregunto gai

-         Pensé que nuestra cena no hablaría- dijo tayuyá.

-         ¿cena? ¿acaso están locos?- respondió el hombre con molestia.

-         Basta de juegos acabemos con esto- dijo kimimaro con seriedad.

A la velocidad del sonido hicieron pedazos el cuerpo de aquel hombre devorándolo despiadadamente hasta dejarlo seco.

--------------------00000-----Al Día siguiente-----00000----------------------

Sakura estaba sentada en su cama con su laptop viendo noticias y leyendo algunos libros virtuales, mientras cambiaba de canal escuchando a los medios de comunicación hablar de la muerte de maito gai y rock lee las cuales estaban relacionadas.

-         Vampiros… solo eso puede ser- susurro la pelirosa.

Esa era la palabra clave de su búsqueda.

Los vampiros eran seres sobrenaturales. Había rumores de que ciertamente habían existido pero su sed de poder los había echo perder el control haciendo que los dioses los castigaran fuerza y rapidez sobre natural, un poder ocular sorprendente; eran criaturas fuertes, inteligentes ‘humanos perfectos’ pero incapaces de controlar su sed de poder y sangre.

La familia uchiha era la más poderosa; un inmenso clan de vampiros prodigios, los más fuertes, ricos y envidiados sin embargo eran barbaros. Las luchas constantes entre ellos para ver quien era el mas fuerte acabaron poco a poco con el clan.

Se dice que el hijo mayor de una de las cabecillas se proclamo el mas fuerte acabando con todo el clan itachi uchiha era su nombre; estos fueron enterrados en un mausoleo donde se suponía que descansarían en paz o irían al infierno pero al ser abierto siglos después habían un faltante de dos cuerpos. Itachi uchiha y sasuke su hermano menor quienes desaparecieron con akatsuki después de la masacre.

Akatsuki los vampiros de la nube roja así eran llamados ninjas que habían traicionado sus aldeas y luego de ser encontrados y contratados por los uchiha para ser los protectores de los niños que serian los futuros cabecillas del clan fueron convertidos en vampiros. Los cuales ayudaron al  itachi uchiha con la destrucción del clan, si los lideres del clan si hubieran sobrevivido a tal suceso los habrían desterrado llamándolos traidores.

Los cinco del sonido (blood strong)

Cinco vampiros impulsados por orochimaru un científico renegado el cual experimento con sus cuerpo creando los primeros vampiros artificiales grupo que era dirigido por kimimaro kaguya heredero de un clan de guerreros extintos.

Los dioses pensaron que el volverlos inmortales los castigarían a todos por los crímenes que cometieron haciéndolos vagar por toda la eternidad condenándolos al sufrimiento.

-         Inmortales…- susurro sakura.

-         Sakura ¿Qué estas haciendo?- pregunto tsunade.

-         No es nada- respondió la pelirosa cerrando la laptop

-         Necesito hablar contigo sakura- dijo con seriedad- es imposible volver a operar… se te ha operado ya dos veces y aun así tu corazón vuelve a debilitarse una y otra vez te hemos hecho demasiados exámenes y  no podemos entender por que los tratamientos no hacen su efecto.

-         Ya veo… eso quiere decir que… moriré pronto- respondió la pelirosa cabizbaja.

-         siento mucho no poder ayudarte sakura- dijo tsunade.

-         Si puede ayudarme- dijo sakura- déjeme salir, no quiero pasar mis últimos días aquí… déjenme ir por favor- dijo mientras contenía sus lagrimas.

-         Pero eso seria riesgoso…

-         Quiero volver a ver las calles; sentir la brisa en mi rostro el frio de la grama del parque en mis pies quiero ser libre tsunade-sama

-         Esta bien- respondió.

0==========000======= Al día siguiente========000============0

El padre de sakura había ido por ella al hospital y al salir la chica fue obligada a sentarse en una silla de ruedas.

-         Lo había olvidado… a fin de cuentas no puedo recuperar mi libertad- susurro la pelirosa.

Afuera del hospital las esperaba su madre, hinata, ino y naruto quienes a pesar de saberlo todo estaban allí para darle fuerzas.

-         ¡Sakura- chan!- dijo naruto emocionado.

-         Hinata, naruto, ino- dijo la chica sonriendo.

-         Desde aquí nosotros nos encargamos- dijo ino con tranquilidad.

-         Cuídenla y recuerden deben volver antes de las cinco para que puedan regresar a sus casa a tiempo- dijo la madre de sakura.

-         No se preocupen yo las cuidare- respondió naruto

-         Eso es lo que me preocupa- dijo el padre de sakura.

Los chicos siguieron con sus planes mientras que los padres de sakura volvieron a su casa y a la hora pactada regresaron casa uno a sus casas.

-         Es ridículo que tengamos que escondernos- dijo sakura molesta.

-         Es por nuestro bien- respondió su madre.

La noche comenzaba a caer mientras que todos ya se encontraban descansando y los blood strong rondaban la ciudad desierta.

-         Se suponía que esto seria un cambio, no puedo pasar los últimos días de mi vida encerrada- susurro sakura con frustración- ``los últimos días de mi vida`` ¿tan insensible me he vuelto? ¡Voy a morir… voy a morir!- dijo con nostalgia.

La pelirosa se sentía frustrada ante la situación, no quería estar allí y sentirse de esa manera así que se cambio y salió sigilosamente de su casa.

Las calles no estaban en penumbras a pesar de la hora todo estaba visible por los grandes focos luz y había una espesa capa de niebla cubriendo todo el lugar; hacia frio. La pelirosa caminaba pausadamente por las calles para no exaltarse.

Unos jeans negros; una blusa de color rosa y un largo abrigo negro la cubrían del frio.

Su cabello color rosa parecía danzar con la suave brisa que pasaba entre ellos mientras que ella continuaba caminando en dirección al parque luego de llegar se sentó en un columpio mientras observaba la hermosa luna.

El cielo estaba repleto de estrellas adornadas con sus suaves destellos de luz .

Aquel lugar le recordaba aquel momento, sai había sido injusto pero lo que había echo era lo correcto ella tampoco quería arruinar su vida atándolo a ella en esas condiciones.

Peques gotas de agua salada se colaron de sus ojos resbalando por sus mejillas; recordar lo sucedido la hacia sentir mal pero eso le recordaba que después de todo no se había vuelto tan insensible.

-         ¿Por qué estoy llorando?- se pregunto- ¿es por ese recuerdo? Aun sigo siéndole indiferente a la muerte… se que esta cerca esperando por mi pero tengo la sensación de estar preparada para lo que viene- susurro- no le temo a la muerte pues se que una vez este envuelta en sus brazos descansare en paz.

-         ¡vaya, vaya! ¿pero que veo aquí?- dijo sakon.

-         ¿Quién eres?- pregunto sakura alarmada.

-         Soy la muerte y he venido por ti- dijo con seriedad.

-         Sakon no juegues con la comida- dijo tayuyá molesta.

-          No vivirás mucho tiempo…- dijo kimimaro sentado en el columpio de al lado- tu corazón esta deteriorado puedo sentirlo- dijo con nostalgia mirándola a los ojos- late con fuerza intentando resistirse a su destino pero es inevitable morirás en una semanas…

Sakura no lo había notado al estar ante la presencia de estos sujetos se había exaltado debía tranquilizarse o algo malo sucedería.

-         Kimimaro, acaba con ella- dijo ukon

-         Así que eso quieres- dijo un chico detrás de el.

-         <> - pensó sakura

-         Te equivocas yo nunca seré como ellos- respondió con arrogancia.

La pelirosa se sorprendió, aquel chico había respondido a su pensamiento ¿Cómo era posible? ¿Qué pasaría ahora, se desencadenaría una batalla o ella moriría?

-         ¿a que has venido?- pregunto kimimaro levantándose del columpio.

-         He venido a buscar a mi presa escapo hace pocos minutos, y acabo de encontrarla- respondió.

-         <>

-         Esta chica no es tu presa- respondió tayuyá.

-         Y tu que sabes ¿acaso me espías? ¿sabes donde escondo mis presas?- respondió con frialdad mirándola.

-         Has lo que quieras, esta mujer no nos sirve- dijo kimimaro.

-         ¿de que hablas?-pregunto sakon.

-         Morirá antes de que podamos tocarla, no me gustan esas presas- dijo para luego desaparecer.

-         No creas que te saliste con la tuya- dijo ukon.

Luego de que kimimaro abandonara el lugar los otros chicos poco satisfechos lo siguieron, la pelirosa estaba petrificada no sabia en que pensar, ni que decir ni su cuerpo le respondía estaba perdida.

El pelinegro desapareció del lugar donde se encontraba dándole un respiro a la pelirosa que al verlo desaparecer salió del trance recuperando la movilidad en su cuerpo, para su sorpresa el pelinegro reapareció frente a ella repentinamente la miraba fijamente a los ojos mientras que  con la punta de sus dedos tocaba su pecho sintiendo así los latidos de su agitado corazón.

-         A esto se refería- dijo el pelinegro con tranquilidad.

-         ¿Qué eres?- pregunto la chica asustada.

-         Eso no es de tu incumbencia- respondió con molestia.

-         Eres un vampiro arrogante- dijo la chica.

-         ¿Cómo sabes lo que soy?-pregunto el.

-         No lo se- dijo ella.

-         Así que eso piensas he?- dijo el chico con arrogancia.

-         Eres un vampiro arrogante- dijo sakura molesta para luego intentar irse del lugar y ser detenida por el chico.

-         ¿A dónde crees que vas?-pregunto mirándola con seriedad.

Aquella mirada la hacia temblar realmente, no sentía que fuera peligroso pero aun asi era un vampiro no debía confiarse; su mirada la envuelto. Aquellos ojos tan negros y profundos como la noche la envolvían por completo.

-         A-a mi casa - respondió asustada.

-         No dije que pudieras hacerlo eres mi presa ¿lo entiendes?-dijo con arrogancia.

-         <>- pensaba sakura temerosa de lo que pudiera suceder.

-         Nada en especial- respondió con tranquilidad.

-         Deja de meterte en mi cabeza-dijo molesta

Sabia que le aterraba el saber que el escuchaba sus pensamientos y eso lo hacia tener el control, además era divertido ver sus expresiones de miedo y sorpresa cada vez que el respondía a las preguntas de su pensamiento.

-         No invado tu mente solo quiero que tengas en cuenta algo… humana- dijo para luego de desaparecer y reaparecer detrás de ella susurrarle al oído- acabo de salvar tu vida por lo que ahora me perteneces, y luego irse del lugar.

Sakura espero unos minutos para estar segura de que ya no estaba allí y luego de comprobarlo  se fue a su casa.

-         ¿Le pertenezco?- susurro al darse cuenta de lo que el chico acababa de decir.

Al entrar en la casa trato de hacer el menor ruido posible para que sus padres no sintieran su presencia.

-         Un vampiro…- susurro para luego recordar las palabras de kimimaro- solo una semana de vida… no puede ser cierto- se decía a si misma.

Sakura se paso la noche en vela sin darse cuenta y al amanecer su madre entro a su habitación al verla sentada en el balcón con la mirada perdida en el inmenso cielo azul.

-         Sakura ¿estas bien?- pregunto su madre algo preocupada.

-         Si eso creo- respondió sin mirar atrás.

Luego de unas horas la pelirosa bajo de su habitación preparada para salir.

-         ¿A dónde vas?-pregunto su madre.

-         A tomar aire fresco… estaré en el parque- respondió sakura.

-         Pero sakura…

-         Estoy bien, además si voy a morir en una semana quiero disfrutar al máximo- dijo sonriendo para luego salir de la casa rápidamente antes de que sus padres articularan palabra alguna.

Sakura se encontraba en el parque esperando ver nuevamente al pelinegro pero en lugar de ser el fue a sai a quien vio.

-         Sakura ¿eres tu?- dijo sai.

-         Sai…- susurro

-         ¿Cuándo saliste del hospital?- preguntó.

-         Hace poco- dijo la chica esquivando la mirada del chico.

Aun no estaba lista para verlo, no después de lo que había pasado.

-         Sakura, yo…

-         Lo siento sai, pero debo irme- dijo la pelirosa.

-         Espera sakura quiero disculparme por…

-         Debo irme- respondió nerviosa.

-         Solo será un momento… solo escúchame.

-         Yo… no puedo sai…

Sakura ya no quería estar en aquel lugar, no quería hablar con sai tampoco quería verlo. En aquel momento sintió una s inmensas ganas de correr pero sabia que no podía hacerlo, su cabeza pedía a gritos que alguien la ayudara; que alguien la ayudara.

-         Sakura escúchame- dijo sai acercándose a ella.

-         Sakura ¿Qué sucede?- pregunto el pelinegro apareciendo de la nada.

-         Estas aquí- susurro sakura

-         Se me hiso algo tarde pero ya estoy aquí ¿nos vamos?- pregunto sasuke con seriedad.

-         Si, vamos-respondió sakura.

Sakura se preguntaba como era que sasuke había aparecido en aquel lugar ¿Cómo la había encontrado? ¿Cómo sabia su nombre? Se preguntaba muchas cosas mientras que ella caminaba por las calles a su lado.

-         Solo pasaba por allí- respondió el restándole importancia a sus palabras- deja de preguntarte tonterías.

-         Esto te parece divertido no?- dijo la pelirosa con molestia.

-         Si, es algo interesante… ‘sakura’- dijo con arrogancia dejándola atrás.

Los chicos se dirigían a una parte de la ciudad que sakura no conocía, todo era realmente tranquilo y cálido estaban parados en un lugar desde donde se podía ver toda la ciudad; la suave y cálida brisa acariciaba sus rostros.

-         Esto es hermoso-dijo sakura- pensé que los vampiros hacían otras cosas

-         ¿Cómo que? Chupar sangre y asesinar personas… no tienes que saber nada me debes la vida y debes hacer lo que te diga- dijo molesto

-         ¡yo no te pedí que me salvaras! Moriré en pocos días… ¡no sabes lo que es vivir con este cuerpo! Despertar cada mañana sabiendo que la muerte esta al asecho- dijo molesta la pelirosa intentando correr  para alejarse de el lugar.

Cuando de pronto su corazón comenzó a hacerla sentir mas débil su respiración comenzó a fallar, su cuerpo pesaba y se desmayo en un instante el pelinegro al darse cuenta fue a ayudarla.

-         sakura… ¡despierta!- decía el chico.

-         ¿Qué estas haciendo con esa humana? sasuke- pregunto itachi apareciendo ene l lugar

-         Déjame en paz

-         No debes involucrarte con humanos.- sakura comenzaba a despertar y escucho las palabras de sasuke.

-         Sasuke…- susurraba sakura débilmente.

Sakura despertó y pudo ver claramente la forma como estaba vestido itachi y al darse cuenta de lo que sucedía se asusto.

-         Akatsuki…- dijo asustada

-         Sakura… tranquilízate.- decía sasuke

-         Tu también estas con ellos… aléjate!- decía la chica temblando.

La mirada de miedo y rabia en los ojos de sakura ería de sobremanera a sasuke. Su orgullo estaba siendo herido al igual que sus sentimientos solo por un malentendido e itachi lo noto.

-         Te equivocas… niña el no tiene nada que ver conmigo- dijo el pelinegro.

-         ¿a que te refieres?- preguntó ella.

-         Sasuke es mi hermano, pero esta por su cuenta- dijo desapareciendo.

Luego de que el malentendido se aclarara se dirigieron a la casa de sakura, sasuke podía notar que a medida que la chica caminaba su corazón se volvía inestable por lo que se ofreció a llevarla en su espalda.

-         No, yo puedo caminar- respondió con dificultad.

-         Tu corazón esta muy débil- dijo intentado ocultar su preocupación

Sin mas sakura subió a su espalda mientras que sasuke emprendió camino, la sensación que le producía estar en su espalda era inexplicable aquel sentimiento apoderándose de ella dándole una sensación de calidez, nunca se había sentido así con nadie mas y eso le hacia pensar en muchas cosas y al recordar que sasuke de seguro estaría escuchando sus pensamientos se sonrojo…

-         ¿es aquí?- pregunto el pelinegro.

-         S-si es aquí- respondió saliendo de su trace.

Sakura bajo de la espalda del pelinegro apenada debido a que la mayoría de sus vecinos los observaban.

-         Sasuke ¿escuchaste algo?- preguntó la pelirosa

-         ¿a que te refieres?

-         Mis pensamientos…

-         ¿No querías que dejara de hacerlo?- pregunto con arrogancia.

-         Es cierto- dijo sonriendo.

Sakura se adentro en su casa luego de despedirse del pelinegro que varios minutos después desapareció.

La noche callo cubriendo de sombras las calles, algo había comenzado al surgir al estar cerca de la pelirosa por lo que las dudas y la inseguridad lo invadieron por primera vez; de algo estaba seguro debía alejarse de ella de una forma u otra no le quedaba mucho tiempo y el al ser inmortal seria quien sufriría las consecuencias.

-         Sasuke…- se escucho a sus espaldas pero el no volteo- sasuke- dijo la chica nuevamente logrando captar su atención.

-          Sakura… ¿Qué estas haciendo aquí?- pregunto- deberías estar descansando.

-         ¿Qué sucede por que hablas así?

-         Sakura… no podemos seguir viéndonos- dijo el pelinegro.

-         ¿Es por mi enfermedad?- dijo la chica- me abandonaras igual que el lo hiso-  decía entre sollozos.

-         ¿de que estas hablando?- preguntó el chico.

Una fuerte brisa se apodero del lugar y surgió una hermosa melodía mientras que kimimaro decencia de un árbol y se posaba sobre una roca.

-         ¿que estas haciendo aquí?- pregunto sasuke.

-         Así que todavía no te has desecho de la humana- dijo el chico con seriedad.

-         ¿Qué quieres?- pregunto sasuke parándose frente a sakura para protegerla.

-         No esta permitido que un vampiro se enamore de un humano… esta chica morirá en menos de tres días ¿Por qué no acabas con ella? Acaso quieres que los dioses vuelvan a castigarte…

-         - ¿hay una castigo peor que la inmortalidad? No lo creo –dijo el pelinegro molesto.

-         Así que están aquí… - dijo itachi apareciendo detrás de sakura- han sido los culpables de todos los crímenes cometidos.

-         Uchiha itachi, también apoyas a sasuke?...

-         No, el tonto de mi hermano siempre hace lo que quiere yo no me inmiscuyo en sus asuntos.- respondió el uchiha mayor con arrogancia.

-         Sasuke… -susurro la pelirosa.

-         Tranquila- dijo itachi con tranquilidad.

-         Sasuke tenemos que hablar- dijo itachi con seriedad.

-         Ahora no…

-         Es importante.

-         ¿Qué sucede?

-         Nagato tiene información que estoy seguro de que te interesa- respondió itachi.

-         No lo creo.

-         Es sobre la inmortalidad…

Estas palabras captaron la atención de sasuke que después de dejar a sakura en su casa fue con su hermano al escondite de akatsuki.

-         Y bien ¿Qué es lo que sabes?- pregunto a nagato.

-         Dentro de tres días habrá un eclipse solar lo que nos ayudara a descansar en paz, si ya has cumplido con la tarea de los dioses. Entonces podrás irte tranquilamente y reencarnar en otra vida como un humano- dijo nagato con seriedad.

-         ¿cumplir con la tarea de los dioses? ¿de que hablas?

-         Solo tu sabrás cual es la tarea que te han encomendado tus ancestros, nosotros ya hemos cumplido con la nuestra.

-         ¿Cuál es esa tarea?- pregunto el pelinegro con desesperación.

El hilo rojo del destino esta atado a tu dedo y esta atado a tu destino solo podrás verlo a su debido momento…

Aquellas palabras daban vueltas en su cabeza  mientras que caminaba por las oscuras calles de Tokio intentando descifrar aquel acertijo.

-         Hilo del destino- dijo con molestia- si logro encontrar donde esta el lazo del hilo acabara esta pesadilla- pensaba.

========000===========000===========000=========

La pelirosa se encontraba dormida y en aquel sueño estaba perdida entre la neblina que la rodeaba; caminaba en círculos y la situación comenzaba a frustrarla.

El nerviosismo y la desesperación se apoderaron de ella por lo que su respiración comenzó a faltarle y a lo lejos podía ver el cielo… podía ver como estaba por comenzar el eclipse lunar que habían anunciado seria dentro de poco.

Sakura se desmayo cayendo inconsciente en la fría grama a los pies de un gran árbol y al despertar pudo observar claramente un destello rojo en su dedo.

El lazo era demasiado fuerte por lo que no podía quitárselo fue entonces cuando la pelirosa se percato  que aquel hilo rojo provenía de donde el sol y la luna estaban por unirse y se levanto y caminando poco a poco mientras seguía el hilo. Cuando a lo lejos pudo observar la silueta de sasuke quien estaba con akatsuki parado en un lugar muy alto que los dejaba expuestos al eclipse.

-         ¡sasuke!- grito la pelirosa

El pelinegro logro escucharla y al voltear y ver el lazo del resplandeciente hilo rojo en su dedo sus ojos se tornaron rojos y sakura despertó.

El corazón de sakura estaba en su limite había permanecido dormida dos días y casi no podía mover su cuerpo pero le importaba poco como pudo se levanto de la cama y bajo las escaleras para intentar salir de la casa.

-         Sakura, no puedes salir… no estas bien- decía su madre desesperada.

-         No me importa!- dijo la chica logrando llamar la atención de sus padres – necesito verlo!

El eclipse comenzaría en unas horas y sakura debía apresurarse a llegar a aquel lugar. Escapo como pudo y subió a un taxi que la dejo en el lugar a lo lejos noto a los miembros de akatsuki y también a sasuke.

-         Sasuke… ¡sasuke!- gritaba débilmente.

-         La luna y el sol estaban por unirse y los miembros de akatsuki comenzaban a desaparecer poco a poco mientras que pocos rayos de sol iluminaron la mano de sakura mostrándole al uchiha el brillo del hermoso hilo rojo.

-         Sakura… eres tú- susurro el pelinegro al notarlo.

-         Sasuke… ¿Qué esta sucediendo? – pregunto desconcertada.

-         Mi destino era conocerte, sakura este eclipse es mi única oportunidad de descansar en paz y…

-         No, no puedes irte… sasuke se que soy egoísta pero no puedes dejarme

-         No lo are sakura yo..

-         Yo… te amo sasuke por favor no me dejes.

El pelinegro se acerco aun mas a sakura que estaba un poco exaltada y la abrazo para luego sellar el momento con un cálido beso el cual ella correspondió, sasuke desato el hilo del dedo de sakura sin que ella lo notara y cuando la luna y el sol se juntaron su cuerpo comenzó a desaparecer.

-         ¡sasuke!- decía la chica asustada.

No te preocupes sakura… volveremos a vernos- dijo sonriendo por primera vez para tranquilizarla.

Su cuerpo desapareció por completo mientras que la pelirosa seguía parada en el mismo lugar con el hilo rojo entre sus manos.

-         No te preocupes…- dijo itachi.

-         No volveré a verlo- decía la chica arrancando a llorar.

-         Claro que volverán a verse- dijo el uchiha mayor.

-         Eso, es imposible mi corazón a comenzado a detenerse… puedo sentirlo

-         Sasuke ha sido liberado por lo que es posible su reencarnación al igual que la tuya ese hilo en tus manos es tu garantía.

-         ¿reencarnar?

-         Así es… una vez el desapareciera mi deber era decirte esto para dar paz a tu alma por lo que yo también me iré.- dijo sonriendo.

Itachi desapareció en cuestión de segundos mientras que sakura al intentar irse se desmayo y un joven peliblanco al verla desplomarse la tomo en sus brazos y la dejo en la puerta de su casa y luego de tocar la puerta también desapareció.

La madre de sakura al escuchar la puerta abrió enseguida encontrándose con la pelirosa agonizante recostada de la pared.

-         Sasuke… sasuke – susurraba en su delirio.

la pelirosa no podía abrir los ojos, la presión que sentía en su pecho dificultaba su respiración; definitivamente estaba en sus ultimas y mientras que sujetaba aquel hilo rojo con fuerza su madre lloraba desconsolada mientras que su padre llamaba al hospital.

-         Estaré bien- susurro sakura – voy a reunirme con el madre… nos reuniremos en otra vida, sasuke y yo estaremos juntos…

Una pequeña gota de igual salada escurrió por sus ojos resbalando por sus mejillas para luego acabar en la mano de su madre quien la sujetaba con fuerza aferrando su cuerpo a ella, pero su corazón se detuvo instantáneamente luego de decir.

-         Los amo… papa… mama

¿Qué significa realmente la inmortalidad?

Durante la vida y la muerte existen límites

La reencarnación puede ser posible en algunos casos

Sakura y sasuke tenía la viva esperanza de volver a encontrarse

Y en su último respiro creyeron fervientemente en ello.

Su esperanza, un brillante hilo rojo

 

Durante el próximo eclipse lunar

Bajo el cielo y las sombras traerán a la vida

A dos jóvenes amantes

.

.

.

.

Continuara

 
Notas finales del capítulo :
bueno espero les alla gustado

gracias por leer ^^

chicos de ustedes depende si la historia

continua o este es su final

haganme llegar sus comentarios y comenzare a escribir la

proxima parte

si desean que la continue prometo no decepcionarles

y si tienen sugerencias que decean incluir

pues mejor estoy para servirles

y transportarlos a otro mundo con mis historias aunque no sean tan buenas

gracias por su apoyo

espero sus comentarios bye bye!!  :=D:

Tags: