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El Lobo Alado.
Wolframe:
Mi primer fic, disculpen si mi narracion es tosca, estoy intentando mejorar en la marcha, cualquier consejo o tip, sera bien recibido, es más si tienen algun consejo me dicen porfavor...
Esto pasa en una tierra magica y los hecho pasan en un Albion ficticia, asi que abran ciertas provincias o nombres de pueblos inventados...solo para pone contexto...espero que les guste.
Capitulo 1
--Reino de Albion, Provincia de Frotz, 5:32 a.m--
En una pequeña comunidad rural de la sureña provincia de Albion, vivía la familia Skye. Una singular y unida familia sostenida por el célebre guerrero y mercenario Kaidan Skye junto a su hermosa y extrañamente común (para la personalidad excéntrica de Kaidan) esposa Lucia Skye una amorosa mujer de la cual el veterano seguía perdidamente enamorado pese al pasar de los años. Junto a sus hijos una imperactiva joven de 16 años de nombre Norah y un extraño pero amable joven de 20 años llamado Christopher conformaban una extraña pero divertida familia....que tenían la costumbre y la tendencia a hacer alborotos por el más mínimo problema. Cosa que fastidiaba un poco al otro miembro de la familia Skye un joven Kalestino de nombre Stefan, a quien Kaidan adopto 4 años atrás y entreno en el oficio.
El Kalestino de 17 años, siempre fue el miembro más callado y educado de la informal familia, pero encajaba bien, Norah lo veía como cualquier hermano y Chris es bastante amable con él, Lucia lo trataba pese al poco tiempo como un hijo y Kaidan es la figura paterna que nunca tuvo. Estaba muy agradecido con aquella escandalosa familia, la cual mucha veces trataban de integrar a Stefan a sus locuras, ya sean concursos de comido contra Chris y Kaidan o ayudando en la cocina con Lucia. Norah raras veces se le veía tejiendo o cocinando, nunca le gusto esas cosas y es algo que tanto Stefan como Kaidan apoyan fuertemente. En resumen son una familia muy unida. Y ese día Stefan iría en su primer trabajo junto a Chris y Kaidan, y pese a la bulla madrugadora estaba ciertamente emocionado, aunque se negaba a reflejarlo.
De pronto golpes consecutivo tocaron a la puerta de la habitación y antes de poder levantarse, ya la joven castaña había irrumpido a la habitación y dando un salto se proponía a caerle encima a Stefan en son de despertarlo. Stefan ya estaba acostumbrado a ello y como todas las mañanas, es aplastado por Norah quien agarrando la almohada lo golpea en la cabeza, diciendo.
-¡Despierta, pedazo de tronco! ¡Hoy es el gran día! o a poco quieres llegar tarde a tu primer trabajo eso sería...-
-Bien, sabes que ya estaba despierto ¿verdad?-Indica irritado pero con naturalidad el joven, quien no tenía los ojos cerrados y que cuya cama ya estaba en orden.
-Sí, pero no iba dejarte que te fueras si despertarte abruptamente ¿o sí?- le respondió Norah, y es que cada día lo despertaba abruptamente y de diferentes formas, desde cazerolas hasta recientemente uso de bombas de humo.
Stefan se limitó a sonreír, y la aparto arreglándose la larga chaqueta de cuero a la cual estaba sujetada dos hombreras y guantes de metal ligero, cortesía de Chris para el viaje.
-Ve diciéndoles que ya estoy listo, y voy bajando- le indica a su hermana pero entonces se paraliza al ver que su mirada melancólica con la que lo veía, y lanza un suspiro y acercándose le dice:
- Tranquila no es para siempre, volveremos dentro de un par de semanas, no es la primera vez que tu padre o tu hermano se van-
Pero sabía que no era por ellos su extraña mirada recelosa, y es que pese a no ser familia, Norah siempre ha sido una gran amiga de él durante todos eso años. Le resultaba difícil saber que decirle para animarla, ya que ella había sugerido ir con ellos pero Kaidan es un poco sobre protector con ella y apenas y la deja entrenar con armas de fuego con supervisión de un amigo suyo, Kimbly, quien era experto en armas de fuego. Y hasta que no esté lista no podrá ir con ellos, cosa con la cual él estaba de acuerdo.
-Mira hagamos un trato cuando volvamos, si logras mejorar tu puntería en los ejercicios de Kimbly, me asegurare que te llevemos en el siguiente trabajo, sabes que nunca miento- le dice con una cálida sonrisa, ella le devolvió la sonrisa algo escéptica pero ella sabía que él jamás mentía...jamás.
-¡¿Te vas a quedar acostado o qué?! ¡Baja de una vez a comer!- Sonó imponente la voz de Kaidan, y sin decir más ambos jóvenes bajaron por las escaleras hasta llegar a la cocina. Allí un hombre alto de pelo castaño y de barba corta, lo esperaba al lado de un joven adulto de casi el mismo alto que el padre, llevaba una corta cola de caballo y se hallaba revisando el equipaje.
-Vamos Stefan, ve ya nos hace tarde si queremos llegar a la ciudad para la tarde- Decía el barbado hombre al joven que recién se sentaba a la mesa a comer, un muy bien hecho, desayuno de pan con ensalada.
-Ya déjalo cariño- le espeta con voz suave pero autoritaria, un hermosa mujer de 35 años, de cabello negro y ojos café -No está acostumbrado a levantarse tan temprano para viajar-
-Tranquila Sra. Skye, el tiene razón debí estar lista hace 15 minutos, es solo que me quede recostado por unos minutos- se excusa humildemente.
-¿Unos minutos? ¿te tomaste tu medicamento?- le pregunta algo nerviosa la señora y el asiente, esto la alivia haciendo que de un suspiro-...entonces ¿en qué pensabas?- pregunta esta vez con voz cariñosa.
Stefan no le gustaba hablar de él mismo y menos de sus pensamientos, además no hacía falta, Kaidan sabia en que pensaba o al menos lo intuía, y haciéndole una seña le dice a su esposa que no insista.
Al terminar de comer, Stefan da gracias por la comida y levantándose se termina de alistar. Kaidan aún estaba chequeando las cosas para el viaje, y Chris se hallaba hablando con su madre, en eso Stefan irrumpe.
-¿alguna idea de que se trata el trabajo?-
-Eso es lo que le digo a mamá, no estoy seguro, pero parece algo grande como para que alguien tan testarudo como mi papá, decida llevarnos- índico Chris quien había interrogado incansables veces a Kaidan acerca del trabajo, pero cada respuesta se tornaba progresivamente más ambigua.
-Es cierto, aunque no puede ser tan malo, de ser así le pediría apoyo a Kimbly- indica Stefan al ver la angustiosa cara de su madre.
Pero antes de que se dijera más del asunto, Kaidan irrumpe.
-Bueno chicos, en marcha. "El viaje es largo y el encargo cansado, por lo que mejor vayamos andando"- Dice Kaidan, unos de sus múltiples e improvisados refranes.
-No sería, así si tomáramos el tren- Se queja Chris por lo bajo y su padre lo oye.
-¡Hey! ¡Sabes lo que pienso de esas endemoniadas cajas con ruedas!- Le espeta.
-¿Que son dragones metálicos conspiradores contra la corona?-Dice Chris sarcásticamente.
-¡No! ¡Eso sería ridículo! Papa piensa que son ballenas gigantes terrestres que eventualmente se comerán a los pasajeros, cuando todos se duerman- contribuía Norah riéndose.
Esto sonaría raro o cruel si no fuera que el miedo a los trenes estaban fundados, en las numerosas pesadillas que tuvo al dormirse la primera vez que viajo en un tren, haciendo que se lanzara de él en pleno movimiento. Desde entonces se burlan al respecto.
Lucia les lanzo a ambos una mirada de reproche y ambos guardaron silencio, Kaidan se acerca y le da un beso de despedida a Lucia y a Norah, Chris hizo lo mismo y ambos salieron. Stefan se limitó a abrazarla, más ella se aferró a él para decirle susurrando:
-Esta vez tienes a un lugar al cual volver...- y le da un maternal beso en la mejilla. Stefan le agradece y dándose la vuelta sale por la puerta donde Chris le lanza un arma.
ÉL la atrapa y al desenvainarla ve que se trata nada menos de una espada larga y plateada, de doble filo y con una runas escritas en la plana, su empuñadura negra y larga (para lo que normalmente son las espada de ese tamaño), era cómoda al tacto pero sólida. Esa era su primera espada real.
-Un pequeño regalo de nuestro herrero- indica Kaidan.
-Tengo que recordar agradecerle a Cid el detalle- Dice Stefan mientras envainaba su nueva arma. Dándose la vuelta se despedía con la mirada a Lucia y Norah, y volviéndose a sus ahora compañeros de trabajo se dirigía a emprender su primera tarea.... pero ahora que lo piensa ¿¿qué diantres se supone que harán??.
--Reino de Albion, Provincia de Frotz, Ciudad Clover, 6:08 p.m--
Todo el viaje se desarrolló sin problema alguno, y llegaron relativamente rápido, aunque algo extraño era que por el camino en que iban no vieron a ninguna persona de camino a Ciudad Clover, y más en temporada de tréboles por los cuales era popular la ciudad, por lo contrario vieron a varias personas saliendo de la cuidad y sin importar lo que les dijeran ellos no respondía a las preguntas, pero esto no parecía sorprender a Kaidan quien no dejaba de actuar con normalidad, ¿era la experiencia actuando? ¿O es que de ante mano sabe algo que los dos no?. Pronto ambas preguntas se respondieron, ya que al llegar la turística ciudad de Clover se había convertido en un grotesco campo de batalla...algo en verdad malo sucedía allí...
Fin del capitulo
Mística:
Una historia de aventuras, genial xD
Buen comienzo y lo has dejado muy interesante. Me gustan los nombres de los personajes, en especial el de Stefan :) No sé, algo me dice que este chico será un gran guerrero, crucial para la historia *w*
En cuanto a la ortografía, noté acentos ausentes, así como algunas comas, pero como bien has dicho, con la práctica irás mejorando, solo no dejes de escribir y de ponernos la continuación de esta aventura que pinta emocionante y la que esperaré sin duda xDD
Gracias por compartinos tu historia.
Saludos.
Wolframe:
Gracias, ya estoy haciendo el otro, gracias por los tips... :=D:
Wolframe:
Capitulo 2
-- Provincia De Frotz, Ciudad Clover, 6:30 p.m--
En el reino, no era raro ver conflictos armados entre sus pueblos, y es que Albión siempre fue una nación algo inestable, en especial en las provincias del sur, las cuales no llevan mucho tiempo de ser anexadas por el viejo reino, por lo que no era nada raro el contratar a mercenarios para intentar solucionar problemas así.
Pero la naturaleza del conflicto que azotaba esa turística ciudad era extraña. Los comercios y hogares, que generalmente estaban abiertos a toda hora, se hallaban cerrados o abandonados, el olor a pólvora y a metal abundaba en el aire; la plaza a la cual Stefan y la familia Skye frecuentaban años tras, caracterizada por estar siempre llena de vida, se hallaba ahora arropada por la tensión existente en la ciudad, aún así habían lugares abiertos, y gente que entraban y salían de ellos, mas sus miradas que antes desprendían gozo y jovialidad, solo reflejaban miedo y rabia, y si algo le llamo la atención al joven Kalestino es que se repetían dos símbolos particulares: uno de una curiosa balanza con dos sables entrecruzados; y otra de un cuervo posado sobre lo que parecía un pedestal rojo.
Finalmente Kaidan se detiene en seco frente a un conservado Pub, que pese al tenso aire parecía ser el único lugar que se mantenía "apacible" por así decirlo. Al entrar, las miradas de todos se dirigieron al trio de viajeros que acababan de entrar, con la mano en el arma listos a lanzarse al ataque, por fortuna al ver que se trataban de viajeros, se calmaron y volvieron a tomar asiento.
Stefan no salía de la impresión, ya que ese lugar era frecuentado por guardias del pueblo, pero no había ni un oficial allí, en su lugar veía gente hablando pero no parecieran estar escuchándose los unos a los otros, solo hablaban por el sencillo deseo de hablar, con ojos cansados y con una cerveza a la mano, habían jóvenes no mayores que él, bebiendo y con un mosquete en mano.
-Esto no está bien...- dijo Chris por lo bajo y Stefan logro oírlo, y era un pensamiento con el que simpatizaba.
Finalmente ven a alguien quien les hace una seña para que se acerquen y ellos se aproximan a aquel rincón en donde una elegante y esbelta dama los estaba esperando. Al llegar a la mesa, Stefan pudo ver con más cuidado la mujer frente a él, era una elfa de corto cabello castaño y ojos pardos, luciendo una llamativamente elegante pero simple túnica azul claro, decorada con detalles de plata, y en la mano tenía el sello de la balanza con los sables entre-cruzados.
-Usted debe ser Kaidan Skye, es un placer conocerlo, mi nombre es Amelia Tristán, soy la segunda al mando de la orden de Ius, un placer- dice con una elegante y serena voz, pero no era de extrañar tal cortesía al hablar, dado a que la orden de Ius son una muy apreciada organización independiente que se da a la tarea de lidiar contra cualquier amenaza que atormente a la comunidad, son conocidos por tener un rígido código de la justicia y son adiestrados desde jóvenes para la labor.
-¿Qué tal?, tú debes ser la vocera que me contrato- dice Kaidan sin dar importancia a lo cortes del saludo.
-Así es, me alegra ver que no han tenido problemas en llegar aquí. Veo que el buen Christopher está presente, pero ¿quién es el joven a su lado?- pregunta curiosa, la elfa.
-Él es mi hijo menor, Stefan- dice con naturalidad- ahora si no es tosco de mi parte preferiría hablar de una vez del trabajo por el cual nos contrató-
Ella no parecía sentirse ofendida en absoluto de la evidentemente grosera respuesta del mercenario y les invito a sentarse junto a ella.
-Muy bien, tratare de ser breve y directa... necesito que me ayuden a detener este conflicto- dice con una seria y severa voz.
Pero "¿qué le pasaba? ¿En verdad pensaba que un trio de mercenario pueden detener un conflicto civil de ese calibre solo porque si?" este pensamiento recién había penetrado en la cabeza de Stefan cuando ella le sonríe, como si supiera en lo que estaba pensando.
-Me explico- Continua la elfa pero, esta vez, con voz más serena -Esta confrontación, pese a que pareciera tener años de estarse librando, tan solo y lleva un par de meses. Es difícil de creer, pero es la verdad, y es que lo que deterioró tanto este lugar no fue los enfrentamientos casi diarios, sino lo que los causo. Como sabrán, pese a que Clover fue catalogada como ciudad, seguimos dependiendo mucho de la producción agrícola de los campos que están a las afueras de la Ciudad, donde también se dan los tan visitados campos de tréboles.-
Stefan y Chris estaban familiarizados con el concepto, la familia solía tomar vacaciones en esos enormes campos que eran un lugar realmente concurrido, y es que además de los tréboles que se hallaban allí, también había un gran lago cristalino, al rededor del cual se hospedaban visitantes en cálidas tabernas y posadas.
-Pero como también se sabe que, esa no es la única razón por la que viajeros de varias partes del continente hacen una parada en esta ciudad...- Y la voz de la elfa se vuelve a tornar seria y hasta comienza a reflejar desprecio- También están el Corvus Volunt…-
-Disculpe mi ignorancia, pero que es el Corvus Volunt.- Pregunta Chris.
-El Corvus Volunt es un culto-Le responde su padre- un grupo de personas nómadas que viajan de pueblo en pueblo, ofreciendo servicios de diversos tipos, adivinación, ofrecen pociones, amuletos de fortunas, conceden deseo...-
-Son un puñado de gitanos que realizan actos de magia paganos y condenados tanto por el clero como por el círculo de magos- Le espeta severamente Amelia dando un golpe a la mesa de la rabia. Y por lo que Stefan sabia parece ser cierto.
Stefan siempre estuvo interesado en las artes arcanas pero jamás tuvo la oportunidad de retomar sus estudios de magia, pero hasta donde sabia, era bien sabido que la iglesia y los hechiceros jamás se han caído bien, pero si coinciden en que hay prácticas que deben ser condenadas por el peligro que representa para el orden natural de las cosas, disciplinas como la necromancia, magia de sangre, pactos con seres oscuros, etc. Eran condenados de magia oscura, y son ilegal penados muchas veces por la muerte. Pero esa no era toda la verdad.
-Disculpen- Vuelve a irrumpir cortésmente el Kalestino -Pero a no ser que este en un error, la adivinación, la realización y venta de pociones, se trataría de brujería como tal ¿no es así?-
Amelia parecía sorprendida de que un joven y más un mercenario estuviera al tanto de ese detalle, y es que no todos saben que la magia oscura y la brujería, pese a ser practicas paganas, la segunda no se halla condenada bajo ciertos requisitos. Esto es tema de mucha polémica, ya que pese a que la brujería "deforma" la realidad, sus efectos son mayormente imperceptibles, pero aún así no se puede negar de las numerosas veces que tratos con brujas han terminado en miseria para el "cliente".
-Así es, y por ello nos tuvimos que acostumbrar a su presencia aquí. Pero recientemente han pasado cosas en verdad malas, primero los campos de tréboles fueron desapareciendo dejando no más que hierba muerta en donde antes solían estar; luego la gente comenzó a enfermarse de diversos males pero todos ellos raros o nunca antes visto en este reino y aunque ninguno es infeccioso, se sigue presentando gente enferma en los hospitales y hasta en las iglesias; pero lo peor fue lo que paso recientemente y es que el orfanato que estaba a las afuera del pueblo en los campos de tréboles, fue quemado y ninguno de los niños lograron salir- Tras decir esto hizo una pausa breve, y tomando aire continua - Pero lo extraño es que desde ese día, las llamas del incendio no han cesado, no han crecido pero tampoco se han extinguido, hemos usado magia, exorcismo con ayuda de los sacerdotes locales y cualquier otro medio pero nada-
Esto hizo pensar a Chris y Stefan ya que por más que sea, todos esos tipos de fenómenos son en verdad demasiado extraños y es muy conveniente de que los del Corvus Volunt estén próximos al lugar de los incidentes, pero había algo que no encajaba. Kaidan sabía que era, pero quería ver si alguno de sus hijos daría la iniciativa.
-Lo siento pero es difícil de concebir que el Corvus Volunt este detrás de estos incidentes- Dice Chris finalmente -Si de brujería se trata, se lo suficiente como para decir que ellos no son de los que actúan directamente, es más va en contra de sus pocos principios, además no ganan nada con ello, son nómadas así que no están el suficiente tiempo en un sitio como para adquirir tal rencor como para agredir así al pueblo.
Stefan pensó en eso también pero había algo más, algo no se estaba diciendo.
-Pero usted sabe eso ¿no? No es solo por eso que estamos aquí, ¿no es así?- indica Stefan pendiente de la reacción de la elfa y es que ella ya debía de saber eso de ante mano pero había algo más que la molestaba, y no se equivocaba ya que ella se sonríe.
-Correcto, en el pasado pese a que muchos podría ver mis acciones como frías y descorazonadas, no tengo remordimiento alguno, sé que nuestros códigos son rígidos pero necesarios y me he sentido orgullosa de nuestro trabajo hasta ahora- Pero de la nada la voz comienza a temblarle y sus dedos a moverse en signo de nerviosismo -Más en este caso, no se ya que pensar, estas personas por pagana que sea sus prácticas jamás habían lastimado a nadie, ¿por qué comenzar ahora? y lo peor es que sectores más conservadores de la población, quienes nunca les agrado su presencia en el pueblo, han comenzado a hacer una cacería de brujas en propósito de eliminar a quien sea que vaya o venga de ese campamento y esto no queda impune, y los que apoyan al Corvus Volunt tratan de protegerlos a capa y espada. Al principio nos posamos de lado de los conservadores pero ¿cómo se justifica el apedrear a mujeres y niños solo porque estuvieron allí, así se por casualidad? y lo más perturbador es que ninguno de los gitanos se han defendido en lo más mínimo.
-Y ¿por qué no se van? son nómadas ¿por qué quedarse bajo estas circunstancias?- Pregunta Chris ya abrumado de la cantidad de elementos que estaba incidiendo en el problema. Amelia guarda silencio unos segundos y luego dice:
-"Porque aún hay un deseo que no se ha cumplido..." esa fue la respuesta que nos dieron-
Un frio silencio la mesa de aquel, ya vacío, Pub. Era abrumador todo lo que estaba pasando y el decir que no se irán sabiendo el peligro que corrían allí y hacían correr a las personas que los defendían, era una insensatez. Pero ya era obvio lo que debían hacer, aunque no sería fácil...nada fácil.
-Muy bien- Dice Amelia tras terminar su té - Se hace tarde, dejo esto en sus capaces manos, cabe destacar que tienen tres días para terminar con esto, porque no hacerlo ustedes....me temo que nosotros nos veremos obligados a tomar medidas más radicales.- Y sin más que decir y que responder se levanta de la mesa dejando al par de mercenarios con la mente abrumada, sin embargo, Kaidan parecía mucho más tranquilo y, es más, apenas e intervino en la discusión, era obvio que ya sabía gran parte de la historia desde antes de venir, pero aún así ambos jóvenes tenían sus mentes demasiado ocupadas como para reclamarle, había mucho por hacer y muy poco tiempo.
Kaidan sonríe satisfecho del desempeño de sus dos hijos y, sin tener nada que agregar, se levanta no más que para pedirle al cantinero un par de habitaciones en donde pasar la noche. El alto hombre barbado le da una llave a Chris pero no a Stefan, quien de inmediato supo por dónde iba esto.
-Déjame adivinar…- Dice el joven con una pesada voz.
-Así es, sabes las reglas, eres nuevo haces los recados, pero no te preocupes, por ahora solo necesito que me traigas un reloj de bolsillo-Le dice mientras le daba una bolsita con monedas de oro.
Stefan dio un gran suspiro, y viendo la hora en el reloj de pared que estaba en la entrada se dispuso a salir (el cual ya marcaba las 8 ), y es que resultaba fútil intentar disuadir a Kaidan de pedidos de última hora como estos, y era lo suficientemente excéntrico o estricto como para dejarlo dormir en la calle si no cumplía el recado, los sabia por experiencia pasada de Chris en su primer trabajo. Aunque ¿Dónde se consigue una relojería abierta a esa hora?
Y efectivamente, la relojería estaba cerrada, y no veía ningún rastro de otra en la cercanía. Pero antes de que Stefan pudiera decir la más mínima queja, las campanas de la iglesia local comenzaron a sonar repetidamente y oyó como todas las ventanas de los hogares se cerraban a su alrededor, no había salido de su confusión cuando ve a alguien correr hacia él. No logro distinguir la figura sino hasta que esta se hallaba a pocos metros de él, era una hermosa joven de cabello plateado y extrañas prendas purpuras, quien se detiene al seco y al ver a Stefan por unos instantes, se acerca rápidamente y con ojos suplicantes le pide que la saque de allí.
Stefan no terminaba de salir de su impresión, pero al ver la angustia en el mirar de la joven, el asiente automáticamente causando así, que la extraña muchacha, de un suspiro de alivio. Pero entonces, la luna mostró con más claridad la apariencia de la joven frente a él y mayor fue su sorpresa cuando vio en su mejilla el símbolo del cuervo sobre el pedestal…. Era del Corvus Volunt… Y al fondo se empezaban a oír el escándalo de una multitud que se oía cada vez más numerosa y cada vez más cercana a ellos… Y por más cansado que estuviera, Stefan sabía que esa iba a ser una larga noche...
Fin del Capitulo
Mística:
Wow, que interesante conversación tuvieron los hombres con Amelia Tristán, otro lindo nombre ;D.
Me pude imaginar el poblado, desolado y en despojo y la parte final, me causó intriga. Dos bandos, un hombre y dos chicos. ¿Qué pueden hacer ellos? ¿O más específicamente, qué hará Stefan al respecto con esa chica?
Buena continuación, espero la que sigue xD
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