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No Me Alejare de Ti por Segunda Vez
tarumi:
cap 45
Ya te vas?—pregunto Naruto serio con el rostro, recargándose en el marco de la puerta de su cuarto, aún estaba en pijama; dirigiéndose a su inquilino. Sasuke solamente detuvo su andar, con la mano en la manija de la puerta del departamento dispuesto a irse . Al no obtener respuesta volvió a cuestionarlo—Cuando piensas decirme?.
Sin dirigirle la mirada, a la vez que abra la puerta respondió—pronto.
Naruto suspiro cansinamente escuchando el sonido sordo de la puerta al cerrarse. La relación con su amigo se había vuelto rutinaria, donde Uchiha salía antes del amanecer y regresaba a altas horas de la noche con signos evidentes de arduo entrenamiento, ocasionalmente cenaban mirándose directamente a los ojos donde Naruto podía ver y sentir una sed de venganza renovada, sus conversaciones se limitaban a preguntas simples con respuestas monosilábicas, se había vuelto mucho más distante y frio, su rostro ya ni siquiera reflejaba enojo o desprecio tan característicos de él en el pasado.
Pero la relación con Sasuke no era lo único que lo agobiaba pues Sakura constantemente lo seguía hasta el punto de hartarlo, con preguntas complicadas y llenas de suposiciones acerca de que había pasado antes y durante su estancia en el hospital. En un principio eran cuestionamientos simples donde las respuestas eran vanas y mentiras pero cada vez fueron mas y mas complicadas de responder sin revelarle la verdad, Naruto estaba seguro que sus recuerdos brotaban poco a poco. A demás estaba la boda de Neji con Hinata, que gracias a la suerte o el destino había sido aplazada debido a una misión que Neji y su esquipo debieron tomar, era una tarea complicada por lo tanto llevaría tiempo y aun que la noticia había sido un respiro para el rubio conforme los días pasaban, sus sentimientos se volvían cada vez más inestables; tristeza, coraje, alegría, desasosiego, Tranquilidad, etc. Y por último estaba el hecho de que el Kyubin ahora estaba dispuesto a platicar con él.
Porque aún le das vueltas al asunto?—pregunto el zorro. Así es el Kyubin volvía a iniciar una conversación.
El muchacho de pronto se encontraba frente a frente, custodio y prisionero, viéndose cara a cara.
No puedo evitarlo, debe haber una solución.
El zorro rio disfrutando la expresión del rubio—Las respuestas ya las sabes. Sasuke no te revelara información a menos que sea o crea necesario, después de todo es un Uchiha, así que solo debes esperar pacientemente, a tu amiguita evítala y si no es posible ignórala y en cuanto a tu “querido amor”—palabras que dijo con burla—no hay nada que puedas hacer.
Ante estas respuestas el chico se molesto—¡Y eso a ti que te importa!
En absoluto, pero comienzas a desesperarme con tu estado de humor. Naruto se sorprendió había olvidado que su huésped percibía sus emociones y pensamientos.
Así es niño, te conozco mejor que nadie; dudas, problemas, deseos, alegrías y ¡todo!—rio nuevamente—y si me dejas darte un consejo. Mejor haz algo que te mantenga ocupado, entrena, come, duerme, lo que sea!, para que yo pueda descansar de tus grandes problemas.
El rubio parpadeo varias veces antes de volver al a realidad
ann91:
Hola!! :ohnoes:
Estan cada vez mejor los capitulos
que lastima que haya sido tan corto
jajajaj pobre kyubi esta casi traumado
con los sentimientos de Naruto xD
Espero la continuacion
:ohnoes:¡¡Hasta Pronto!! :ohnoes:
karin-sakura:
¡JAJAJA QUE GRACIOSO!, el kyubi con trauma sentimental jejejjeje. Espero la continuación pronto. :=D:
tarumi:
aqui esta el siguiente capitulo espero les guste :)
cap 45
Al llegar a casa del rubio, Uchica se dejo caer pesadamente sobre el sofá, abrumado por sus acciones de aquel día, se reprochaba una y otra vez haberse dejado llevar por sus emociones y haber cedido ante el deseo que incontables veces había reprimido.
Suspiro tratando de apartar al amor de su vida de sus pensamientos. Pasaron algunos minutos antes de que pusiera en orden su mente. Una vez ya dispuesto a olvidar lo acontecido. El sonido de unas llaves lo volvió a la realidad.
La puerta se abrió, indicando la llegada de Naruto, Sasuke lo observo y por el semblante del ojiazul podía deducir que él tampoco había tenido un buen día.
-Debemos hablar--sentencio el dueño del lugar
-Ahora no –respondio el otro mirando hacia el techo sin interés.
-Sakura vino a verme—continuo, ignorando el comentario anterior. Se paso la mano por la frente, pensando en cómo diría lo siguiente—se lo que paso hoy…entre ustedes—soltó sin delicadeza.
-Fue un error—comento Uchiha queriendo dar por terminada una plática que apenas comenzaba.
-Escúchame por favor--Después ambos se miraron a los ojos y Sasuke comprendió que era algo realmente importante, así que prestó atención.—vino confundida preguntando que le estábamos ocultando. Fingí no saber de qué me hablando pero ella insistió.
Que le dijiste—soltó molesto su compañero al ver que Naruto se había sumido en sus propios pensamientos. El rubio narro su encuentro omitiendo el estado en el que la chica había ido en su consejo, suplicando por respuestas, por la verdad.
-En un principio trate de calmarla pero no resulto después ella me gritó que planeas irte de la aldea.
Después de aquellas palabras el ambiente se tenso volviéndose pesado y hasta cierto punto sofocante.
-Eso es todo?—volvio a iniciar la conversación el único miembro del clan Uchiha. Naruto tanteo la situación y continuo.
--su memoria está regresando, sabes lo que eso significa—ante aquellas palabras el cuerpo del azabache se tenso—no podras ocultarle la verdad por mucho más tiempo ¿Qué harás cuando eso pase?.
Las palabras de su amigo eran justo lo que Sasuke no quería que pasara jamás. Tenía miedo de volver a ver sufrimiento en la mujer que amaba y tener que narrarle lo acontecido sería una tortura para ambos.
Del otro lado de la aldea estaba Sakura caminando entre las calles solitarias de una de las secciones menos transitadas por los aldeanos. Se encontraba hecha un lio, le dolía el pecho, sentía una gran opresión en el mismo, que le impedía respirar, sus ojos estaban llorosos y le picaban, los sentía pesados. No sabía que pensar.
Harta de no poder llegar a una conclusión concreta, se detuvo recargándose en la pared de un edificio y miro al cielo. Estaba hermoso, las estrellas tintineaban sobre aquella infinita obscuridad acompañando a la luna que desde lo alto era ajena a todo lo que acontecía en la tierra.
Sintió una gota caer sobre su mano, acaso está lloviendo?, se pregunto la chica comprobando que el cielo continuaba apacible. Después se percato del origen de aquella gota, eran sus lágrimas que salian lentamente de sus ojos. Sin percatarse había vuelto a llorar. Se maldijo a sí misma recordando las palabras de Naruto
“Yo no puedo decirte lo que buscas, por favor ya no insistas”
-Joder Naruto que me están ocultando!—grito presa de la frustración.
-Sakura-chan? Escucho en la obscuridad. La mencionada busco con la mirada a la dueña de aquella voz.
-Qué estas haciendo aquí?—pregunto un poco osca la ojiverde
Hinata no se cohibió ante el tono de voz de la ojiverde y le respondió de igual modo.— Salí a caminar un poco, el ambiente del clan me estaba asfixiando—dijo dando media vuelta para irse.
-¡Espera!—corrió la ojiverde tomando la manga de Hinata que detuvo su andar—lo lamento, no quería hablarte de ese modo. La Hyuga, la miro enternecida, su acto infantil la había conmovido.
-¿Qué tienes?—pregunto comprensiva mientras la abrazaba.
Ante aquellas palabras llenas de ternura Sakura volvió a llorar, esta vez sin reparo dejando que el dolor e incertidumbre se hicieran presentes en cada gota salina que derramaba.
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Ya era la hora de la cena en casa de Naruto y por primera vez desde que su amigo llego a vivir con él, Sasuke ayudaba con la preparación de está. Hacía ya un rato que la plática sobre los recuerdos y actitudes de la única mujer de su equipo había quedado zanjada.
-A caso no piensas preguntarle?—dijo divertido el zorro, ciertamente las conversaciones de aquellos dos personajes lo divertían. Naruto siempre tratando de evitar las preguntas del Uchiha imponiendo las suyas propias y la actitud de Sasuke típica de un Uchiha que a cualquiera otro intimidaría lo suficiente para no acercársele. Eran un par bastante peculiar.
-Y eso a ti que te importa?—respondió severo Naruto en su pensamiento, a la vez que aumentaba el ritmo de cortar unas rebanadas de queso; acción que no paso desapercibida por Sasuke.
-El ocio es la madre de todos los vicios, Naruto y digamos que yo no tengo mucho en que entretenerme.
-Eres un cínico—bufó el rubio. En respuesta el zorro rio.
-Vuelve a la realidad—exigió el azabache con un tono de voz monótono.
-Eh?...es que—trato de justificarse con una risita nerviosa Uzumaki.
-No me importa lo que tú y el Kyubin platiquen, pero si quieres comer tendrás que ayudar—declaro tomando un cuchara para mover el guiso.
-Si, mon capitán,--se burlo el prisionero moviendo todas sus colas.
Ah! No me vengas con esas teme!—grito señalándolo acusatoriamente-- Y será mejor que tú te calles—sentencio el chico dirigiéndose el kyubin.
Eres muy ruidoso DOBE—respondió el azabache, disfrutando de la frustración del Uzumaki, aún que no lo demostrara.
Tiene toda la razón—expreso el zorro, cruzando las patas delanteras esperando la siguiente rabieta.
Las horas continuaban pasando y con ellas la obscuridad iba ganando terreno, los grillos tocaban su melodía a coro acompañada por el zumbar de las cigarras y el ulular de un búho anunciando la de caza. A pesar de la hora aún Naruto no lograba conciliar el sueño y Sasuke esperaba pacientemente la hora indicada.
-Hay algo que debo contarte dijo Uchiha levantándose de la cama y dirigiéndose a la sala. Naruto lo siguió y ambos se sentaron en el nuevo sofá, uno al lado del otro. El azabache después sin previo aviso activo su sharingan enviándolos al lugar menos pensado por el rubio.
Uzumaki miro a su alrededor, en un principio confundido pero pronto su reacción fue sustituida por una de sorpresa. Se hallaban dentro de él.
Tiempo sin verte—dijo a modo de saludo el kyubin dirigido a Sasuke.
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