ESCUELA POWERPOLT
CAPITULO 1
Era un día caluroso Yato un pequeño delincuente de 15 años, estaba con su pandilla pavoneándose como siempre de que había sido expulsado en más de 20 institutos y colegios, se sentía el más importante de la banda.
Estaba totalmente orgulloso de sus logros, era el joven más temido en Kamamura ciudad donde vivía, y su mayor deseo era ser el más temido de todo el país, lamentablemente para el, su nombre se había escampado como la pólvora en todos los centros educativos y no era aceptado en ninguna, cosa que evitaba superar su récord.
El verano se estaba acabando y ningún sitio aceptaba al joven Yato Miura, sus padres Hiro y su madre Tatsumi había intentado por todos sitios pero no lo conseguían no había manera.
Finalmente cuando solo quedaban 3 días para comenzar el curso, sus padres consiguieron matricularle en un nuevo colegio llamado Powerpolt, cosa que alegró mucho a Yato por fin podría superar el reto, eso es lo único que pensaba este delincuente, que sonreía y lanzaba una pequeña carcajada, pero su padre le cogió del cuello y le aviso que no hiciera de las suyas, mientras la madre del joven estaba haciendo la comida, Yato aprovecho.
-"Parece que ese es el guiso de mama"- entonces su padre se distrajo y empezó a mover la nariz intentando captar el olor, momento que aprovecho el joven para escaparse y coger a su padre de la misma manera que antes le cogía a el.
Entonces entro su madre tan dulce como siempre, una mujer de 43 años, morena, delgada y de muy buena figura que siempre tenia una sonrisa de oreja a oreja, en cambió su padre era un hombre de 46 años de complexión gruesa, de carácter fuerte era totalmente contrario a su esposa.
-"Parad con vuestros juegos la comida ya esta lista"- y los dos se separaron y se sentaron en la mesa mientras se lanzaban miradas, entonces se escucho la puerta de casa y una joven de 17 años delgada, pelo negro y largo, ojos marrones y muy guapa entró a la sala de estar donde estaban comiendo y cogió asiento.
-"Siento haber llegado tarde, es que me he quedado estudiando con Aoi"- cogió una de las sillas que había cerca de allí y se sentó, y comenzó hablar sobre como le estaba marchando en clase, al contrario que Yato su hermana Akane era una gran estudiante y todos los grandes institutos y por supuesto grande universidades se la rifaban.
Yato bostezó dando a entender que le aburrían las historias de su hermana mayor, enseguida ella se giró y comenzó hablar sobre su hermano y las veces que lo habían hechado y que esperaba que esta vez no pasara.
A su padre le caía la baba mientras Akane hablaba todo lo contrario a cuando hablaba Yato que no paraba de criticarle, después de comer se fue al parque donde se reunía la pandilla, que estaban tomando cervezas, y tirando escupitajos a la gente que estaba debajo del puente donde ellos estaban, mientras se reían de las pobres victimas, y ahí estuvieron hasta a las 7 de la tarde, muchos se fueron yendo a sus casas, ya que comenzaba a anochecer.
Yato y su amigo Kisuke un joven de 15 años igual que el, pelo corto, alto, delgado y de ojos oscuros, paseaban para llegar a casa, eran amigos desde pequeños y además vivían muy cerca, hablaban de superar el récord, y de cosas que les habían ocurrido en la infancia, llegaron a casa del segundo y se despidieron.
El joven llegó a su casa donde le esperaba su padre como siempre para meterse con el y tener la típica pelea padre e hijo, como siempre cuando llegó su madre la riña termino, cenaron, vieron un poco la televisión y se fueron a dormir.
El despertador comenzó a sonar era la hora, Yato se despertó con gran energía dispuesto a superar su récord, entró en el baño se limpió los dientes, desayunó y se marchó rápido y veloz corriendo, habría ido con su moto pero su padre después de la ultima expulsión destrozo la moto.
Llegó donde su madre le había apuntado a las afueras de Kamamura y no veía nada estaba totalmente desértico, miraba y miraba y no encontraba nada solo una gran piedra cerca de el, se acercó y de la piedra salió una luz verde que le cegó los ojos.
Después de unos 2 minutos abrió los ojos y vio una escuela gigantesca y un cartel que tenía al lado de el donde ponía el nombre de la escuela, estaba totalmente impresionado nunca había estado en un lugar así, su cara cambió estaba realmente contento en esta escuela si que podría pasar a la posteridad, se acercó a una chica de pelo medio largo castaño que estaba de espaldas apoyada en un árbol y quiso gastar una de las suyas, se subió al árbol mientras nadie le veía y puso un panal de abejas creo un mecanismo para que quien estuviera debajo del accionador que estaba en el suelo soltara el panal de abejas.
Lo que no imaginaba es que alguien estaba observando todo lo que hacia una joven pelirroja, ojos verdes y de bonita figura lo observaba todo sin que el se diera cuenta, Yato entró dentro de la escuela donde nada más entrar encontró a una mujer de unos 30 años de pelo largo, rubio y rizado, con gafas, de estatura mediana y delgada.
- "Tu debes ser Yato Miura"- a lo que el asintió y le dijo que le acompañara y así hizo mientras observaba un poco el extraño colegio donde estaba, llegaron a una sala de color blanco y allí había un diamante en una capsula. La profesora sonriente le dijo que pusiera su mano sobre el cristal y así hizo el joven, de repente su mano la mano de Yato se iluminó y una voz salió del diamante -"Yato Miura, 15 años, clase B-2"-.
Como si fuera arte de magia la luz desapareció, y el muchacho se quedó tremendamente sorprendido, la profesora Blue Camelot le explicó que era un mecanismo ultra moderno para seleccionar la clase que le tocaba, le enseñó un poco las instalaciones y vió cosas raras, alumnos que lanzaban destellos, chicas que hacían aparecer tigres, el joven finalmente le preguntó que clase de escuela era y la profesora le comunicó que era una escuela de magos.
-"¿Escuela de Magos?"- entonces recordó las risas de su padre cuando se marchaba a dormir, estaba claro que eso había sido idea suya, y por fin llegaron a la clase de B 2, entró y vió que todos estaban uniformados y que en sus pechos lucía el escudo del colegio: Una luna llena y abajo el nombre Powerpolt.
A nuestro delincuente favorito no le gustaba presentarse odiaba eso, por lo que los alumnos de la clase solo pudieron saber que su nombre era Yato Miura y que tenía 15 años nada más dijo ese joven de pelo corto y negro, que llevaba un collar con una calavera y una chaqueta de cuero además de un pendiente en su oreja.
Después se sentó en un pupitre que había en la segunda fila, mientras cruzaban los brazos, y la profesora les decía que se acercaran a donde estaba ella, en el que apareció de repente un armario, donde habían unas 25 escobas todos cogieron la suya que ya tenían sus nombres, hasta Yato tenía una.
La profesora comenzó a explicar que lo primero que tenían que hacer era controlar la escoba, ya que seria algo primordial para superar lo que vendría más adelante, salieron al jardín que tenía el colegio y los alumnos empezaron a dar sus primeros vuelos, todos menos Yato que no conseguía hacer nada su escoba no le respondía y por primera vez la gente se reía de él cosa que enfureció al joven- "Vamos mierda de escoba muévete ya"- entonces la escoba se movió y subió hacia arriba.
Yato estaba realmente asustado cuando se escucho una voz "Retira lo de mierda de escoba, mi nombre es Elric"- nuestro delincuente no daba crédito una escoba le hablaba, mientras subía y subía a mas altura -Si no lo retiras, no voy a parar de subir"- entonces Yato lo retiró, y la escoba se paró, pero claro también se cayó y se dio un gran golpe.
Mientras todos los demás se reían, el salía del agujero con un enorme chichón, y no paraba de lanzar insultos en voz baja hacia a la escoba, mientras la profesora explicaba que necesitaban llevarse bien con sus escobas para poder controlarlas.
Las risas eran continuas una de las chicas - "Parece que ya tenemos al burro de clase, creo que nos vamos a reír. ¿Tu que opinas del nuevo Karen?- una de las chicas que tenía el pelo rubio, ojos azules, de estatura alta y buenas protuberancias y que por si fuera poco era una de las chicas más populares del colegio Powerpolt contestó -" No se, solo se que mmm su esencia me gusta"-.
Lo intento 2 veces más con la escoba Elric pero acabó originando dos boquetes más y por supuesto dos chichones más en la cabeza de Yato. Finalmente tocó la campana la salida del colegio, había sido un día duro y por si fuera poco había quedado como el tonto de la clase, menos mal que tenía su broma preparada y eso le haría subir enteros, se escondió esperando que alguien pasara cerca del árbol y accionara el mecanismo, un joven se acercaba, el delincuente juvenil babeaba solo de pensar lo que sucedería, pero al contrario de lo que había planeado paso por allí y no sucedió nada, así hasta 5 intentos más.
No lo podía creer no entendía que pasaba, se puso debajo del árbol haber sucedía y de repente le cayó el panal a el en la cabeza, mientras corría por fuera del colegio con el panal encima de la cabeza. Cerca de allí estaba la joven de la mañana, riéndose, cuando en ese momento se escuchó otra voz femenina.
-¿"No crees que te estas pasando con el Lila"?- era una joven de pelo corto, rubia, ojos azules delgada. A lo que la muchacha de pelo rojizo contestó -"No lo creo Irien, ese chico quería hacer gamberradas se merecía un hechizo para que lo malo que intentase se le pusiese contra el"-
El pobre Yato pudo deshacerse del penal, y apareció la luz verde y nuevamente después de dos minutos, abrió sus ojos y vió que estaba en el mismo lugar que había estado por la mañana, se fue rápido a casa y cuando lo vieron sus padres llenos de picotazos, moratones por todos sitios se quedaron sorprendidos, la hermana sarcástica comentó -"Hermanito ¿que has venido de la guerra?", a lo que el asintió con desgana, fue al baño mientas se curaba las heridas, cuando por sorpresa apareció su padre por detrás.
Estaba serio incluso parecía preocupado, Yato le contó lo que le había pasado y la cara de su padre cambió y comenzó a reír sin cesar, incluso la casa temblaba, lloraba incluso de la risa, el muchacho harto de tantas risas se lanzó contra su padre y le cogió del cuello.
-" Vaya entonces creo que elegido el lugar ideal, no encontraba ninguna escuela que quisiera aceptarte, y dí con esta, yo creí que lo de los magos era de broma, pero ¡oye miralo por el lado bueno!, podrías ser todo un Harry Potter", Ja, ja,"- el delincuente juvenil apretaba más y más el cuello de su padre, entonces como siempre apareció su madre y los dos se separaron.
Cenó, vió la tele y se acostó solo pensaba en controlar a esa maldita escoba llamada Elric y demostrarle quien mandaba, después de un buen rato se durmió.
CONTINUARÁ